El rol de la figura del padre, como pieza fundamental de la familia, afecta positivamente a la sociedad. Su ausencia o el no asumir su actuación de corresponsabilidad en la formación de sus hijos de manera activa y permanente, es causante de los diversos problemas de orden mundial. Un padre es fuente de salud mental; puede ayudar a sus hijos a aprender a ser mejores hombres y a sus hijas a sentirse mejor consigo mismas.
Muchas veces descalificamos lo que siente un hombre, porque pensamos que los sentimientos de paternidad son distintos a los de la maternidad, puede que así sea, pero no por eso son memos intensos, ni menos valioso, ni menos reales y sinceros.
Yo creo que la figura de un padre incita al hijo a adaptarse a la novedad y fomenta la asunción de riesgos, conocimientos, guía y acompañamiento al hijo, con valor y determinación. Un mensaje paterno puede hacer que un hijo o una hija tengan un autoconcepto de éxito o de fracaso. Los hijos son el reflejo de los padres.
Los padres que ejercen su papel con responsabilidad y compromiso suelen ser hombres más felices, generosos, empáticos, son mejores trabajadores, mejores ciudadanos y mejores modelos a seguir. Además es fuente de reconocimiento social.
Tradicionalmente la figura paterna ha estado limitada a proporcionar el sustento económico a la familia. La paternidad responsable ejercida con conciencia puede ser ejemplo de sensibilidad, la ternura, la aceptación de la vulnerabilidad de los hijos varones y proporcionar a las hijas la certeza de que éstos atributos no son ajenos a la masculinidad y que, por lo tanto, ella hará bien en buscarlos cuando se relacione con un varón. Esto hace que podamos construir un patrón de conducta aproximado a los valores humanos.
En la actualidad es normal ver a los padre en el supermercado, o bien realizando las funciones del hogar, o dedicándose al cuidado de los niños tanto en el aspecto físico, como el aseo personal, así como en el aspecto educativo, de forma activa y protagónica.
La medicina actual les permite a los hombres que asumen su paternidad como parte esencial de la masculinidad, el privilegio de ver la evolución de su hijo desde el momento que esta en el vientre materno, diferentes métodos, terapia y recomendaciones medicas, fortalecen el concepto de la paternidad responsable.
Nunca se deja se ser padre, aunque los hijos crezcan y tomen su camino, los padres son puerto seguro para la vida de cualquier persona.
El amor paternal es salud, que combate cualquier enfermedad. Si usted es padre, comunique los valores abiertamente. Hable acerca del porque tales valores como honestidad, auto-confianza y responsabilidad son importantes, y como los valores ayudan a los niños a tomar buenas decisiones. Enséñeles que con cada decisión que van tomando van construyendo su carácter, y como una buena decisión, hace que la próxima decisión sea más fácil., pero también enséñeles a asumir las consecuencias de sus acciones.
Pero sobre todo, reconozca como sus acciones afectan el desarrollo de los valores de su hijo, ellos copian el comportamiento de sus padres. Los niños cuyos padres fuman, por ejemplo, están más expuestos a hacerse fumadores. Por lo tanto, trate de pensar acerca de esto y evalúe su propio uso de tabaco, alcohol, prescripciones médicas, o cualquier medicamento. Considere como sus actitudes y acciones pueden formar la elección de su hijo acerca de usar o no alcohol y otras drogas.
Los padres que dentro de su rutina de vida, le dan espacio a la actividad física, esta enseñándoles a sus hijos la importancia de una vida sana. Pero por sobre todo no deje que exista ante sus hijos un conflicto entre sus palabras y sus acciones. El vínculo paternal es indisoluble biológicamente, al igual que los lazos afectivos construidos entre padre e hijos son indestructibles.
Angela C.
